#CaminataConsciente del amor.
El Parque del Este es un conjunto de biomas que representan distintas regiones de Venezuela y fue inaugurado el 19 de enero de 1961.
La #CaminataConsciente es un programa de educación ambiental que busca despertar en los caminantes un sentido de pertenencia porque si conozco admiro, cuido y divulgo ese amor por la naturaleza en general y por el Parque en particular.
45 caminantes acudieron a una invitación inusual del restaurante ecológico Las Corocoras para una boda fruto de una historia de amor al suroeste del Parque del Este. El sol brillaba radiante y hacia una brisa suave y fresca perfecta para este evento.
Muy cerca de Las Corocoras está el Lago Carlos Guinand, para llegar pasamos por el Roso Blanco que tiene como característica la flacidez de sus hojas cuando son jóvenes y al madurar se fortalecen y son duras. Desde el lago, mirando hacia el norte vemos el Roso Rojo cuyas hojas tienen la misma característica del Roso Blanco, solo que son de menor tamaño.
En este mes de Junio, por todo el parque podremos ver la Flor de Junio, es un tipo de Bromelia cuya flor rosada embellece el parque de una manera muy especial.
Las podemos observar y disfrutar en el lago Carlos Guinand. También observamos a las Iguanas, las Morrocoyas y los sapitos. Todos muy activos y sonoros, podrían estar comentando sobre la boda que iba a ocurrir. La Bora, una planta acuática con flores moradas se agitaban por el frenesí de estos animales.
Muy cerca del lago, María Teresa de AVEPALMA nos expresa su amor por Las Palmas y nos habla de una Mancha de Palmas, que le pueden decir Palmetum, La Yagua es una Palma gigante del Oriente del país, las podemos observar cuando pasamos por Barlovento. Sus hojas péndulas se transforman en hábitat de murciélagos y las Perezas se entretienen en ellas. Cuando se caen las palmas dejan franjas horizontales en el tallo.
Llegamos al Castaño Africano a quien le tenemos un gran amor por todo lo que nos regala en diferentes meses del año. Es el tiempo en que empiezan a crecer sus hojas color rojizo que nos brinda una sombra fantástica a los caminantes y a las Perezas enamoradas del Castaño Africano y nosotros enamorados del amor de La Pereza con su bebé.
La Cesalpinia nos recibe de fiesta con fuegos artificiales por la noticia de la boda. Bajo su copa escuchamos como explotan sus vainas liberando sus semillas, fue un momento mágico y único.
En este recorrido, dos hadas caminantes con sus bolsas recogieron la basura que afea y daña el parque. Eso es amor incondicional, muchas gracias!
Muy cerca del enlace hay una mancha de Melaleucas, un árbol de corteza bicolor oriundo de Australia, sus hojas se parecen a las del Romero pero más finas y largas de la familia de las Mirtaceas.
Esta historia de amor en el parque fue creada por la caminante María Eugenia Pisani. La narraron y dramatizaron ella y el profesor Antonio y musicalizada por Maickerson.
El Caro Caro vio como a su lado crecía un árbol pero un día despertó y quedó fascinado porque a ese árbol le salieron una flores rojas, más grandes y vistosas que las suyas, eran las primeras flores del Flamboyán que es originaria de Madagascar. Poco a poco se fueron entrelazando sus ramas y consolidando su amor.
Sus padres, hermanos y hermanas, son la mancha de Samanes de la familia de las Mimosaceae, se oponían a esa relación, porque no era de la misma familia botánica y además era extranjera!
Los Samanes fueron buscar apoyo en parientes como Las Jacarandás, uno era el cura, quien abogó por la nobleza y cualidades del Flamboyán comprometiéndose en casarlos.
La noticia rápidamente se conoció y empezaron a producirse manifestaciones de apoyo.
El Gateado, un primo lejano que habita atrás de los Samanes, aportó con sus flores en forma de estrellas la decoración de la novia, las primas cercanas estaban muy emocionadas, El Cañafistol Llanero entregó los anillos de oro y El Mare Mare la decoración de la boda junto al Bucare Anauco. La Tapara, muy elegante en junio con sus ramas cubiertas de pequeñas hojas verdes, ofrecieron las copas para el brindis.
La caminante Lili regaló recuerdos de la boda, una hermosa piedra brillante en la cual tenía pintado un gran corazón. Los caminantes Antonio y Judith cantaron el Ave María guiados por el Director Jesús Malavé.
Como en todas las bodas, surgen comentarios, que si invitaron a fulano y no vino, que mengano se excusó y zutano se enteró tarde. También se escucharon quejarse que no invitaron a la Ceiba ni al Triplaris a la boda.
Si estuvieron el Mango de asomado, y detrás de él, estaba el pueblo observando desde la colina, es la mancha de Araguaneyes.
Terminada la boda nos fuimos al lago de los botes para la recepción. Literalmente se echaron al piso y en vez de los caminantes bailar quienes lo hicieron fueron las Guacamayas Maracanás que nos brindaron un excelente espectáculo.
La espectacular tarde, la belleza de la flora, el buen ánimo de la fauna y la vibra positiva de los caminantes hizo que se viviera una #CaminataConsciente relajante, placentera y llena de energía y mucho amor que sólo la pudieron sentir, experimentar y vivir los que se atreven a caminar.
¡HASTA LA PRÓXIMA CAMINANTES!
Ivo Gómez
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